Cuáles son las distintas soluciones según se trate de la muerte del prestamista o prestatario
El comodato gratuito se basa esencialmente en la confianza, debido a que no se le otorga a algo mueble o inmueble. Por ello, es importante saber qué es lo que ocurre si una de las partes falleciera.
Dado que el comodato se basa en fideicomiso, el conjunto de derechos, deberes y facultades que se derivan del contratto, no puede ser transferido a menos que el prestamista lo permita. Según la jurisprudencia, “la solución adecuada en caso de que una de las partes muera es desaparecer la relación de confianza existente entre los contratantes originarios.”
Los jueces encuentran una ‘reciprocidad jurídica’ para la hipótesis de muerte del depositario o del prestatario: en ambos casos el contratto se basa en la relación de confianza existente entre las partes originarias y no puede presumirse ni infiere que debe existir con los herederos del difunto.
En caso de que releven a la persona fallecida, corresponde únicamente a las partes decidir si continuar o no con la relación de comodato existente. La ley permite ejercer ambas facultades y si una de las partes opta por la segunda opción, la otra parte no tendrá la posibilidad de impedírselo.