Mientras tanto esperan formalizar una carta rogatoria en Perú para escuchar a un tío paterno de la menor detenido en una prisión en Lima
A poco más de tres meses desde la desaparición de Kata, la policía ha tomado la decisión de incrementar su búsqueda interviniendo en el interior del ex hotel Astor, donde esperan realizar una excavación profunda para encontrar rastros de la menor. Mientras tanto, la Fiscalía ha formalizado una solicitud de comisión rogatoria en Perú con la finalidad de adquirir testimonios de personas que se encuentran en el país de origen de la niña, con ella buscan escuchar a un tío paterno detenido en Lima y a otro peruano encarcelado en la misma prisión, protagonista de un problema de drogas que se remonta a mayo de 2022 en Firenze.
Esta decisión forma parte de la última hipótesis que tienen los investigadores, donde según la declaración del padre de la menor, la pequeña pudo haber sido secuestrada por error. Al respecto, el registro de una vivienda en Florencia ocupada por madre e hija acompaña esta versión, donde el supuesto es que Kata pudo haber sido confundida y secuestrada por una venganza relacionada al asunto de drogas.
La interpretación también se relaciona a la principal hipótesis de los fiscales, quienes presumen que Kata pudo haber sido secuestrada con fines de extorsión surgidos en las relaciones conflictivas que derivaron en los delitos cometidos durante la ocupación del ex hotel. Entre ellas también se encuentra la represalia por el escándalo de alojamiento en el Astor, el cual llevó a prisión al tío materno de la menor desaparecida.