Decenas de reclamantes han fallecido a manos de la policía de Kazajistán en las protestas por la subida del precio del gas.
Pesadilla en Kazajistán. Los disturbios en contra del gobierno de Kazajistán están en su punto más álgido. La ciudad de Almaty, antigua capital kazaja y la más poblada del país, fue testigo de decenas de muertes de manifestantes a manos de la policía del país. La institución policial ha denominado dichas acciones como una “operación antiterrorista”, donde se han sumado 10 agentes de seguridad fallecidos este miércoles.
«Decenas de atacantes fueron liquidados. Establecemos sus identidades», manifestó la portavoz de la policía de Almaty, Saltanat Azirbek. En sus declaraciones para la agencia Interfaz-Kazajistán, la representante policial aseguró: «Ellos son fuerzas extremistas que intentaron tomar varias sedes administrativas, el departamento de la policía de Almaty, así como varias unidades regionales de la policía».
Infierno por el gas
El país entero se ha decretado en estado de emergencia después de que las autoridades informen el fallecimiento de 10 policías durante la gresca para expulsar a los manifestantes del aeropuerto de Almaty.
La protesta inició por la subida del precio del gas licuado, principal combustible de Kazajistán. Las manifestaciones han provocado la dimisión del gobierno, además de una coyuntura muy difícil para la población kazaja. Medios locales indican que en la ciudad se escuchan ráfagas de ametralladoras en todo momento, mientras que en redes sociales señalan que policías, militares y hasta los manifestantes están armados y autorizados a abrir fuego.
La portavoz Azirbek finalizó: «En la zona donde se encuentran tres edificios administrativos se lleva a cabo una operación antiterrorista. Instamos a los residentes y huéspedes de la ciudad a evitar salir de sus casas».