Científicos recomiendan al gobierno italiano multar con mucho más de 100 euros a ciudadanos no vacunados contra el COVID-19.
Siguen las restricciones. Los ciudadanos no vacunados han sido el colectivo más complicado de sobrellevar desde que empezó la inoculación contra el Coronavirus. El mayor riesgo llegó cuando se reintrodujo la vacuna obligatoria para los niños escolares. Los padres antivacunas prefirieron pagar la multa de 500 euros en vez de “impregnarle sustancias inmunizantes” a sus hijos.
Italia es uno de los países de mayor riesgo de contagio de COVID-19 en todo el mundo, ostentando enfermedades exantematosas comunes. Los ciudadanos multados con 100 euros por no vacunarse, tendrán que abonar el monto de manera puntual en la Agencia Tributaria. Sin embargo, dicha sanción no le parece justa a todo el pueblo italiano.
Muchas personas piensan que, más que una multa por tránsito riesgoso por contagio, es una mini tarifa que los ciudadanos no vacunados están muy dispuestos a pagar con tal de “no estar obligados a adaptarse”.
El virólogo italiano, Robert Burioni, no duda en señalar de “farsa” la multa de 100 euros contra las personas no vacunadas contra el Coronavirus. El científico mantiene su argumento contra dicha sanción, ya que le parece una payasada el tan pobre castigo a este tipo de ciudadanos. “Siento que venga de un gobierno que pensó que era serio. Espero haberlo entendido mal”, escribió Burioni en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el inmunólogo y ex consejero de salud de la región de Puglia, Pierluigi Lopalco, se refirió a esta problemática vía Facebook: “Es inútil comentar sobre la obligación de vacunación para mayores de 50 años. Puede tener un valor individual para proteger a esos pocos italianos que tienen más de 50 años y no han tomado ninguna dosis de la vacuna Y no han tomado covid. Y no acudirán a un abogado. Lo olvidé: dado el momento de aplicación del decreto, los efectos se verán en la próxima ola. Los efectos que se harán inmediatamente evidentes de forma espectacular serán los provocados por la inminente pandemia de tamponitis aguda que está a punto de arrasar el mundo de las escuelas”.