El proyecto encomendado al Ejército de México, acompañado de cuestionamientos desde su lanzamiento, llega en el momento justo cuando se avecinan importantes plazos electorales.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, inauguró ayer 21 de marzo el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en la Ciudad de México. El proyecto abandonado por el Gobierno anterior que, según el mandatario, era símbolo de corrupción, hoy genera una gran polémica.
Tras estar en pausa por tres años y cuyo costo fue más de 15 mil millones de dólares, el establecimiento solo recibió 2 mil pasajeros. Ello reflejaría diferencias y contradicciones de su administración porque, de acuerdo al mandatario, se espera más de 2 millones de usuarios para finales de año.
Asimismo, ayer solo se registró un vuelo internacional en el establecimiento. Este viaje tuvo como destino la Ciudad de Caracas, en Venezuela, el cual, fue operado por una aerolínea venezolana bajo sanciones estadounidenses.
No obstante, Obrador admitió que la nueva terminal es más popular entre los vuelos de carga que entre los aviones de pasajeros. «Es solo que las aerolíneas aumenten sus vuelos», dijo el presidente. «En el caso del tráfico de carga hubo más avances, el (viejo) aeropuerto de la Ciudad de México también está saturado de carga», indicó.
POLÉMICA
Sin embargo, tras realizarse “en tiempo récord”, para los medios mexicanos, este proyecto «sintetiza mejor que muchos otros» el espíritu de López Obrador al mezclar «el gusto por los símbolos, la terquedad, los ajustes presupuestarios y la omnipresencia del ejército en áreas civiles como la lucha contra la corrupción».
De acuerdo a la información, este es uno de los cuatro proyectos clave que está completando antes de que finalice su mandato en 2024. Ellos serían: el aeropuerto, una refinería de petróleo y dos trenes en la península de Yucatán y otro para los puertos marítimos.
Si bien es cierto que la terminal tiene un área de 384.128 metros cuadrados, nunca se elaboró una declaración de impacto ambiental o un plan de viabilidad completo para su ejecución. Además, se cuestiona sus instalaciones dado que las decoraciones cuentan con mariachis, luchadores y figuras representativas de la cultura popular mexicana.
Como se recuerda, tres meses después de su victoria presidencial de 2018, López Obrador decidió cancelar la construcción del segundo aeropuerto de la Ciudad de México. Esa obra puesta en marcha por su antecesor Enrique Peña Nieto, hoy se conoce como el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.