La acusación señala la instalación ilegal de una residencia para adultos mayores en una granja de Poirino y el abandono de dos ancianos
Una pareja de badanti terminó entre las rejas por el delito previsto en el articulo 591 del Código Penal, que castiga el abandono de menores o personas con discapacidad. Asimismo, fueron imputados por la muerte accidental de un huésped que había sido confiado a su cuidado por una familia durante el verano.
Al respecto, la defensora Stefania Marasciuolo anunció que recurrirá ante el Tribunal Supremo para obtener la absolución de los cargos. “Al anciano se le proporcionó dispositivos para caminar con seguridad”, señaló, luego de un accidente que le quitó la vida a uno de los adultos mayores.
Por otra parte, el fiscal Paolo Fiore los acusó de haber creado una actividad sociosanitaria eludiendo obligaciones a las que están sujetas este tipo de residencias: higiene personal, equipamiento y seguridad. Además, según la fiscalía, los encargados no tenían medios para ayudar a personas no autosuficientes.
Durante el juicio también fueron llamados a declarar varios empleados de ASL, entre ellos un psiquiatra, que realizaba inspecciones en el marco del proyecto Iesa, el cual permite a las familias acoger a un adulto mayor con trastornos psiquiátricos.