El gobierno ha convocado a la unidad de crisis y prevé implantar estado de alarma para restablecer el orden
La tensión se dispara en Francia luego de la muerte de un adolescente de diecisiete años abatido de un disparo en manos de un efectivo policial mientras conducía su auto en Nanterre, un suburbio en París. Tras ello, la ira del país estalló y ha convertido la nación en escenario de enfrentamientos y violencia: escenas guerrilleras en varios puntos con decenas de autos incendiados, barricadas y hasta el asalto con cohetes para juegos pirotécnicos contra un penal de máxima seguridad son las acciones que ha envuelto a la población con un aproximado de 875 detenciones hasta el momento.
“No estoy enojada con la policía, estoy enojada con una sola persona: la que le quitó la vida a mi hijo”, fueron las declaraciones de la madre de Nahel, Mounia M., en una entrevista transmitida por France 5 el jueves por la noche.
“Él no quería matar” dice Laurent – Frank Lienard, el abogado del policía acusado de haber disparado al adolescente a quemarropa. Mientras tanto, la ONU ha pedido a las autoridades francesas tomar con seriedad los problemas de racismo y discriminación por parte de la policía. “Es hora de que el país aborde con seriedad los problemas profundamente arraigados del racismo y la discriminación racial entre organismos encargados de hacer cumplir la ley”, dijo Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos durante una reunión con la prensa de Ginebra.
En un inicio la policía mencionó que el vehículo del joven había intentado atropellar a los oficiales, sin embargo, un video que circula en redes sociales muestra a uno de ellos apuntando con su arma al joven después de detenerlo. Más tarde, cuando éste se fue, uno de los agentes le disparó. “Te dispararé en la cabeza”, se escucha en la filmación.