La menor fue vista por última vez mientras jugaba en el patio antiguo del ex hotel Astor
Más de dos meses ha transcurrido desde la desaparición de Kataleya, la niña de cinco años que fue secuestrada el pasado 10 de junio en los exteriores del ex hotel Astor donde vivía con sus padres. Hasta el momento, el seguimiento de las autoridades policiales no ha tenido mayor alcance sobre el paradero de la menor, sin embargo, una última pista llevaría su búsqueda hacia Perú.
Según la intercepción de una llamada telefónica entre el padre de Kataleya y su abuelo, quien cumple condena en una cárcel de Perú, la niña pudo haber sido llevada hasta su país natal. Durante la llamada grabada realizada desde prisión por el abuelo de la menor, se escuchó al hombre decir: “Ya está aquí en Perú, yo me encargo. Está bien, la secuestraron por error”.
Por ese motivo, las autoridades habían ordenado la incautación de los teléfonos celulares de los padres y otros familiares cercanos en los últimos días. El objetivo trataba de entender si existía la posibilidad de que hayan recibido información útil sobre el secuestro y la han retenido.
Esta última pista es una de las más acreditadas por ahora, teniendo en cuenta que Kata fue víctima de represalias o venganza en contra de su familia por los ataques que se produjeron en el interior del edificio en donde vivía antes de desaparecer.
Por el momento solo el tío materno de la menor, Argenis Abel Álvarez Vásquez, ha sido encarcelado como parte de una investigación paralela: la relativa al manejo de los alquileres de habitaciones del ex hotel. No obstante, no se descarta que esta situación podría estar conectada con la primera.