La mayor parte de las celebraciones se realiza en las plazas, con procesiones, misa y comida típica
El 8 de diciembre, como en muchos países cristianos, se celebra la Fiesta de la Inmaculada Concepción en Italia. Esta fecha significativa fusiona la tradición religiosa con antiguas costumbres populares y ritos paganos. Además, suele ser realizado en plazas, con grandes procesiones, fuegos artificiales, misa y comida típica.
El origen de esta celebración se remonta a mediados del siglo XIX de la mano del Papa Pío XI, aunque en España, además de religioso también tiene un origen bélico: el milagro del Empel o la batalla de Empel, acontecidos entre el 7 y 8 de diciembre de 1585.
En aquella batalla durante la guerra de los ochenta años, un tercio español quedó atrapado en un pequeño monte de Empel, tras la inundación de su campamento por parte de los enemigos, quienes abrieron los diques de un río cercano. Mientras uno de los soldados del Tercio cavaba una trinchera, encontró una tabla flamenca con la imagen de la Virgen María, que utilizaron para crear un altar.
Durante este día, una de las celebraciones principales en Roma es la imposición de la corona de flores en la estatua de la Virgen que se encuentra en Piazza Mignanelli, al lado de Piazza di Spagna. Esta celebración se lleva a cabo desde 1923 y son los bomberos de la zona que ofrecen sus servicios para la colocación de la corona de flores, visto que la estatua se encuentra a 10 metros de altura.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada ciudad italiana tiene una manera diferente de celebrar este día. En Milán, la feria tradicional de Oh Bej! Oh Bej! atrae a multitudes con sus puestos de artesanías y delicias culinarias. Mientras tanto, en Nápoles las calles del histórico barrio San Gregorio Ameno se llenan de vida con los famosos belenes y figuras navideñas.