El día homenajea a quienes murieron en la lucha de liberación.
Italia celebra el 25 de abril de cada año, el Día de la Liberación, jornada simbólica del momento en que se inicia la retirada de las tropas nazis y fascistas que ocupaban el país.
Situado a mediados del siglo XX, 1945 marcó un punto decisivo en la historia del territorio italiano. Fue el final de una tragedia que comenzó con la Gran Guerra y luego con la guerra civil del escuadrón fascista contra todos los partidos enfrentados.
Italia, sujetada veinte años por totalitarismo, estalló en un combate después del 08 de septiembre (1943). El suceso ocasionó un nuevo y violento conflicto civil entre fascistas y antifascistas dentro de la nación que ya venía golpeada por los combates entre ejércitos extranjeros.
Leo Valiani, uno de los historiadores (1959) y líderes de la resistencia, manifestó que: «El antifascismo italiano ha combatido la dictadura totalitaria, desde el mismo día de las leyes excepcionales, con el mismo empeño, con el mismo espíritu de sacrificio y, en la medida de lo posible, con los mismos métodos que la resistencia utilizó después, en la época de la ocupación alemana».
Siendo opuestos durante dos decadas, el 09 de septiembre (1943), los antifascistas se aliaron con el Comité de Liberación para luchar contra un enemigo común. Juntos participaron en la guerra de las Naciones Unidas contra la Alemania Nazi y los fascistas. Posteriormente, en abril (1945), antes de la llegada de los aliados, conquistaron definitivamente la libertad del pueblo italiano, consiguiendo decidir independientemente el propio destino de Italia.
Es por ello que el 25 de abril es una hermosa página de la historia del país porque recuerda el Día de la Liberación del nazifascismo. Convirtiéndose en una fecha que debe unir a Italia, pues, nació a partir de la resistencia de su gente.