También se incluiría una pena de prisión no mayor a cinco años con posibilidad de ser absuelto por el ruido.
El gobierno italiano sanciona con una multa de hasta 309 euros para aquellos que perturben la paz de la ciudadanía por hacer ruido.
Esta infracción, llamada delito por perturbar el orden público, prevista por el artículo 659 del Código Penal, indica una serie de reglas que la ciudadanía y residentes en Italia deben acatar si se busca cumplir con las costumbres básicas comunitarias.
Dentro de estas reglas, se ubican aquellas relacionadas con las señales acústicas y el ruido, de manera que si se desea vivir en armonía con el resto de ciudadanos y residentes en Italia, se deberá cumplir con las siguientes prohibiciones:
- Hacer gritos o alaridos
- Abusar de instrumentos sonoros (pianos, trompetas, estéreos, televisión) fuera de los límites de sonoridad.
- Abuso de las señales acústicas (bocinas de auto, sirenas)
- Provocar o no impedir ruidos de animales
Esto quiere decir que si alguien está con un alto volumen en su coche y las autoridades le encuentran, obtendrá la sanción; de igual manera sucede por gritar en las calles, no evitar que las mascotas ladren o maúllen durante la noche, entre otros.
La realización de estas acciones se consideran un problema para las buenas costumbres sociales italianas, por lo que aquellos que las cometan, deberán pagar una multa de hasta 309 euros, según la gravedad de la alteración pública.
Además, esta infracción tiene la capacidad de sancionar a la persona con una pena privativa de libertad durante un tiempo no mayor a los cinco años, con posibilidad de ser absuelto del cargo por su propia naturaleza de ser un delito menor.
Cabe resaltar que, aquellas personas que cometieron el delito, absueltas o no de los cargos que implica cometerlos, tendrán una mancha en sus antecedentes penales que los perseguirá durante 10 años de cometerse el crimen.