Para acceder a este derecho, las familias deben inscribirse en el Servicio Sanitario Nacional
En Italia la salud no se le niega a nadie, sin discriminar si uno es ciudadano italiano o migrante, pues según las leyes, todas las personas tienen derecho a ser atendidas e incluso hospitalizadas de forma gratuita. Para acceder a este servicio, todos los trabajadores migrantes que cuenten con permiso de residencia por trabajo (incluso aunque se encuentren desempleados) se deben enrolar obligatoriamente en el Servicio Sanitario Nacional con los familiares que están a su costa.
Para acceder a estos, se debe tramitar el “libretto sanitario”, que se solicita en las oficinas de la “Azienda Sanitaria Locale” con los documentos personales: pasaporte y permiso de residencia (en el caso de los trabajadores con regularización pendiente, es suficiente copia de la solicitud y del recibo del correo enviado). En el caso de trabajadores dependientes, estos deben enviar el certificado médico a su empleador.
Cabe señalar que la Ley italiana indica que los servicios médicos (gratuitos o no) deben tener las mismas condiciones para todos los ciudadanos, sin importar su nacionalidad.