La giusta causa también puede hacer referencia a conductas fuera del trabajo
Si el trabajador en algún momento ha violado algunas normas del código disciplinario de la empresa o sus obligaciones derivadas del contrato de trabajo, es válido preguntar en qué casos es legítimo el despido por giusta causa, el cual debe estar precedido de un procedimiento ante conductas graves e intolerables por parte del trabajador. A continuación, los casos en que es legítimo.
El despido laboral por causa justa objetiva se entiende por motivos de carácter económico, vinculadas a la producción y rendimiento de la empresa. Mientras tanto, los despidos por causa subjetiva justificada son despidos disciplinarios que se imponen al trabajador si incumple sus obligaciones derivadas del contrato de trabajo.
Existe giusta causa del despido cuando el trabajador comete una infracción de tal gravedad que impide la continuación, aunque sea temporalmente, de relación laboral. Esta situación se debe a que la conducta del trabajador es contraria a sus deberes como para determinar la pérdida de relación de confianza que lo une a la empresa.
También puede haber giusta causa de despido en caso de una actitud de insubordinación grave del trabajador hacia sus superiores o una ausencia prolongada e injustificada del trabajo. Además, una conducta realizada fuera del horario de trabajo capaz de lesionar la imagen corporativa y la relación de confianza con el trabajador, así como despido de un trabajador en situación de baja por enfermada también supone el despido por giusta causa.
Como sanción disciplinaria el despido por giusta causa constituye el ultimo tramite de un procedimiento especifico, denominado procedimiento disciplinario dividido en tres fases: la impugnación, las justificaciones y la sanción. En caso de que el despido por giusta causa no se justifique, debe reputarse ilegítimo.