Estos datos surgen de un informe de Epam-Fipe, una asociación de empresas públicas milanesas
Los turnos agotadores y bajos salarios para los trabajadores, han sido una parte importante para desistir de trabajos como cuochi e camarieri, sobre todo en Milán. Según los datos de un informe de Epam-Fipe Milano, en la actualidad existe un descenso de trabajadores para restaurantes (-0.6%), bares (-13.3%) y restauración (-13.7%) respecto a 2019.
En ese sentido, solo crece el personal para el suministro de comidas preparadas teniendo en cuenta que más del 80% se dedica a realizar tareas operativas manuales. Asimismo, en cuanto a la jornada laboral, el 55% de los trabajadores se dedica al trabajo en tiempo parcial y el 45% a tiempo completo.
“Casi todas las empresas han tenido dificultades para encontrar personal”, señaló el presidente de Epam-Fipe Milán y Fipe nacional, Lino Stoppani. Sin embargo, el trabajo en establecimientos públicos sigue siendo aún más reconocido en la actualidad.
En este sector el componente femenino supera el 49%, teniendo en cuenta que los trabajadores extranjeros son aproximadamente el 32.7% del total. Por ello, ha instado en transmitir la belleza de la profesión, teniendo presente que siempre existe una evolución constante renovada a las nuevas generaciones.
Cabe destacar que el trabajo en los establecimientos públicos de Milán y de la ciudad metropolitana es un trabajo joven: más del 30% tiene menos de 30 años y el 56% tiene menos de 40.