Alimentos se ven afectados junto al sector agricultor.
Ante las actuales altas temperaturas y sequías que atraviesa Italia, autoridades se encuentran preocupadas por el precio de los alimentos, pues, estiman que algunos de ellos serán más costosos, desatando una especie de “tormenta” sobre los productos agrícolas.
Y, es que algunos productores de arroz estiman que, durante el presente año, el costo de ese alimento subirá un 20%, puesto que está en “alerta roja” tras haberse un 30% de cosechas a raíz del calor.
Otro de los artículos básicos afectados es el aceite. Según las autoridades, se debe a que el incremento de la temperatura en el país afectó gravemente la transformación de flores en frutos y, que en lo que va del 2022, no se ha podido revertir la situación.
El mismo caso se registra con los alimentos como pimientos, melones, sandías, albaricoques, melocotones, tomates y berenjenas. Esas frutas y hortalizas se han visto perjudicadas en un 70%. Pues las zonas donde se cultivan han presentado “quemaduras” por las olas de calor, llevando a que su precio se eleve un 20% a comparación con mismo periodo del año pasado.
Expertos
Asimismo, la Confederación Nacional de Cultivadores Directos de Italia (Coldiretti) señaló que habrá un 30% menos de pastas, una disminución del 20% de pan y la producción de leche en el territorio tendrá una caída.
«Aunque los animales en los establos están ventilados y refrescados por el rocío de agua, las vacas en las granjas están estresadas por el calor y la caída en la producción de leche es el doble de lo que estimamos a mediados de junio (-10 por ciento)», indicó Paolo Carra, vicepresidente de Coldiretti.
Esa declaración de Carra es avalada por los granjeros. Pues, manifiestan que cuando Italia presentaba temperaturas de 22 – 24 grados, las vacas consumían hasta 70 litros de agua cada una para alimentarse. Sin embargo, hoy, con el calor que se vuelve cada vez más intenso, beben hasta 140 litros diarios.
Finalmente, indicaron que las pérdidas podrían alcanzar los 6 mil millones de euros, generando que el sector agrícola pierda un 10% de su valor en el país.