Hacen referencia a las medidas que el empleador puede tomar contra el trabajador que incumpla sus funciones
El empleador puede tomar la decisión de sancionar a un trabajador que haya incumplido sus deberes, aplicando medidas proporcionales al alcance de la infracción. Por tanto, se puede pasar de una amonestación verbal al despido total. A continuación, cuáles son las medidas disciplinarias y cómo actuar frente a ellas.
Las sanciones disciplinarias hacen referencia a las medidas que el empleador puede tomar contra el trabajador que incumpla con sus funciones. Estas son penas privadas, en el sentido de que pueden imponerse en virtud de una relación jurídica privada: la laboral.
Además, se pueden dividir en dos tipos: conservador y no conservador. En el primer caso, son definidos de esa manera en la medida en que no implican la pérdida del empleo tratándose de amonestación verbal, amonestación escrita, multa y suspensión. Mientras que, en la segunda opción, se trata de una acción imputable a las diferentes hipótesis de despido.
En ese sentido, los casos en los que se aplican las sanciones disciplinarias conservadoras son los siguientes:
- La amonestación verbal: Se aplica para las violaciones menores, el empresario puede imponerlo sin seguir un procedimiento particular, ya que no deja rastro en la historia profesional del trabajador.
- La amonestación escrita: Se aplica a infracciones leves para las cuales una amonestación verbal resulta insuficiente.
- La multa: Es una sanción más grave que consiste en una deducción del sueldo equivalente a un máximo de cuatro horas de salario.
- La suspensión del trabajo y del salario: Es la sanción más grave, consistente en la interrupción del pago del salario durante toda la duración de la sanción que en ningún caso puede exceder del límite máximo de diez días.
De la misma manera, el despido representa la única sanción disciplinaria que no preserva ni pone fin a la relación laboral y puede ser aplicada por:
- Razones objetivas o corporativas: Cuando el empleador necesariamente tiene que recortar personal, por ejemplo, por una caída en la facturación o el cierre de algunas unidades productivas.
- Por un incumplimiento por parte del empleado: Que menoscabe la confianza del empleador en él.
Cabe destacar que, para aplicar una sanción disciplinaria correctamente, se debe seguir un procedimiento adecuado. En primer lugar, la notificación de la infracción se debe hacer por escrito haciendo referencia a conductas prohibidas por ley, por el contrato o por el código disciplinario comunicadas al trabajador mediante publicación en la empresa. Sin embargo, el trabajador cuenta con 60 días para impugnar esta decisión por escrito.