Mientras la Unión Europea busca reducir su dependencia de Rusia, Italia dio el primer paso en busca de soluciones para hacer frente a alza de los precios y un posible desabasto.
La tercera empresa con mayor porcentaje de suministros de gas en Europa (11%), Sonatrach, anunció que estaba más que listo para brindar este recurso a través del gaseoducto Transmed que une Argelia con Italia, así lo dio a conocer el director general de la compañía, Toufik Hakkar.
El funcionario mencionó que: «Es un proveedor confiable de gas para el mercado europeo y está listo para apoyar a sus socios a largo plazo en caso de situaciones difíciles».
Razón por la cual, Italia tomó la iniciativa a través del canciller Luigi Di Maio, quien viajó hasta Argelia junto a Claudio Descalzi, director ejecutivo de los hidrocarburos ENI, a fin de “discutir” con Sonatrach un aumento en el suministro de gas, ante una posible caída o restricción de las exportaciones rusas.
Mediante sus redes sociales, el representante de Italia sostuvo que: «Discutiremos el fortalecimiento de la cooperación bilateral, en particular para satisfacer las necesidades de seguridad energética europea, a la luz del conflicto en Ucrania».
Como se conoce, Italia es el país más dependiente del gas ruso junto a Alemania. Sin embargo, ambos vienen planteando la idea de reaperturar sus centrales eléctricas de carbón a fin de amortiguar los precios de la energía.
